El Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) es una de las prestaciones de servicios sociales esenciales, en la medida en que posibilita que las personas puedan permanecer en su entorno el mayor tiempo posible en unas condiciones dignas.

Este servicio, destinado principalmente a personas adultas, aunque no exclusivamente, ha visto ampliada su cobertura de una manera exponencial en los últimos años, con motivo de la entrada en vigor de la Ley 39/2006, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas dependientes.

Otros factores, como la crisis social y sanitaria provocada por la COVID-19, han influido asimismo en que en la actualidad este servicio llegue al 17% de las personas formalmente declaradas en situación de dependencia.

Si tenemos en cuenta que los expertos señalan un incremento estimado del 5% del número de personas dependientes en los próximos 10 años, nos encontramos en un momento propicio para reflexionar sobre las condiciones en que se presta actualmente este servicio en el Principado de Asturias, desde un enfoque multidimensional:

  • A nivel de las propias personas destinatarias, en primer lugar. ¿El SAD satisface las necesidades concretas de sus usuarios/as?, ¿es sencillo el acceso al mismo?, ¿es proporcionado y homogéneo su copago?
  • A nivel de las entidades prestadoras del SAD. ¿Existe capacidad para prestarlo en condiciones de calidad?, ¿hay tensión entre oferta y demanda?
  • Desde el punto de vista de las profesionales que prestan el SAD. ¿Existe margen de mejora de las condiciones laborales?, ¿hay formación suficiente y de calidad?
  • A nivel de las Administraciones públicas que lo gestionan. ¿Resulta eficiente el sistema actual de gestión del SAD municipal y el SAD a personas dependientes?

Todas estas cuestiones han propiciado el inicio de una hoja de ruta basada en un diálogo abierto, eficaz y constructivo entre todas las partes implicadas, que promueva un clima de acuerdo y de trabajo conjunto para conseguir resolver e incluso llegar a anticiparse a los problemas derivados de la complejidad de este servicio.

Por ello, sin ánimo exhaustivo, el “Programa Impulsad 2021-2023”, en continua construcción, pretende abarcar todos estos aspectos, analizando los problemas detectados, sus posibles soluciones y marcando una hoja de ruta como punto de partida para los próximos dos ejercicios, todo ello en el marco de la Estrategia para la Transformación del Modelo de Cuidados de Larga Duración a Personas Adultas del Principado de Asturias y poniendo el foco, principalmente, en personas dependientes y potencialmente dependientes.

Transcurrido un año desde su implantación, se publica la documentación resultante del desarrollo del Programa IMPULSAD, que se puede consultar en documentos relacionados.