N° 21. Segundo semestre. Año 2019



18 de julio de 2019
Coproducción

La European Social Network (ESN), red europea a la que pertenece la Consejería de Servicios y Derechos Sociales, propone la Coproducción en materia de Servicios Sociales como área temática central de su próximo congreso internacional (Lisboa, noviembre de 2019). Con ello incide en las recomendaciones que desde el ámbito comunitario se realizan al promover la coproducción como un modelo de innovación social, favoreciendo el empoderamiento de las personas perceptoras de los servicios sociales a fin de que puedan ser copartícipes en las decisiones de las políticas públicas que más les afectan.

El profesor de ciencias políticas VICTOR PESTOFF, de la Universidad Ersta Sköndal Bräcke de Estocolmo, (1) en un artículo sobre Gobernanza democrática, coproducción y Tercer Sector en la provisión de servicios sociales en Suecia indica que “muchos países europeos están buscando nuevas maneras de implicar a los ciudadanos y al Tercer Sector  en la provisión y la gobernanza de los servicios sociales, con el fin de afrontar los importantes desafíos demográficos, políticos y económicos a los que se enfrenta el Estado del bienestar en el siglo XXI. La coproducción  proporciona un modelo que combina a los agentes de los servicios públicos con los ciudadanos que contribuyen a la provisión de un servicio público” (Pestoff, 2008).

En este sentido, en las sociedades modernas el concepto de coproducción está vinculado a un escenario de profundo cambio que origina nuevas realidades y necesidades  que, a su vez, requieren repuestas diferentes y de las que participan más actores en diferentes niveles (político, técnico, de la sociedad civil organizada y de la ciudadanía).  Permite una orientación estratégica de las políticas sociales e incorpora la innovación como premisa metodológica.

Conceptualmente el modelo de coproducción va más allá de la participación y la cocreación. Desde la perspectiva de los servicios sociales supone una nueva relación entre la Administración y la ciudadanía. Se refiere a la incorporación de las personas receptoras de llos servicios en el diseño y alcance de los mismos, y la influencia de su participación en todo el proceso. Involucrar activamente a todas las partes y compartir experiencias de manera significativa. Implica que profesionales de servicios sociales involucran a las personas que utilizan los servicios en la planificación, implementación y evaluación de los mismos.

Marc Parés, investigador Marie Curie de la Unión Europea en la Universidad de Nueva York, coautor del proyecto Repensar la participación de la ciudadanía en el mundo local,  señala que en el contexto actual “Las soluciones basadas en la coproducción centrarían sus esfuerzos en la comunidad y pondrían énfasis en la lógica de compartir, contrariamente a las dinámicas del mercado, basadas en la lógica competitiva. La colaboración entre personas, organizaciones, actores e instituciones es, en consecuencia, un elemento clave de la coproducción” (Parés, 2017).

Para Parés, “otro elemento central en la coproducción, es la dimensión de lo público, entendiendo que va más allá de lo institucional y que la solución a los problemas públicos se producen desde la comunidad, y en el que las instituciones no ejercen un rol de centralidad. Conlleva, por tanto, un cambio de rol de las administraciones a la hora de elaborar políticas públicas"

En este sentido, una constante en las formas de hacer de la Administración en Asturias durante los últimos años, ha sido involucrar a las partes interesadas en el diseño de las políticas públicas. Ejemplos claros de ello son los que afectan al desarrollo normativo en materia de servicios sociales, como la elaboración del Documento de bases para una nueva Ley de Servicios Sociales del Principado de Asturias, sometido a un proceso de participación y consulta abierto desde el Gobierno de Asturias, mediante la celebración de distintos encuentros,  reuniones y consulta pública, con alta participación y valoración del mismo por parte de las personas que han intervenido.

Otros ejemplos de desarrollo normativo son el Ley del Principado de Asturias 3/2019, de 15 de marzo, sobre acción concertada con entidades de iniciativa social sin ánimo de lucro para la prestación de servicios de carácter social, que regula dichas prestaciones fuera del marco de aplicación de la Ley de contratos del sector público, lo que permite que las entidades sociales que han sido proveedoras de estos servicios durante décadas puedan seguir prestándolos y garantiza que la calidad de la prestación no esté condicionada por los intereses y fluctuaciones del mercado o el Decreto por el que se regula el funcionamiento de los Centros Sociales de Personas Mayores de titularidad del Principado de Asturias. Todas ellas se han realizado en un diálogo sostenido con las partes interesadas incorporando sus aportaciones.

Uno de los retos más importantes que debe afrontar la sociedad asturiana en los próximos años es el reto demográfico. El progresivo envejecimiento de la población y el cambio de perfil de las personas mayores motivó por parte del gobierno de la Comunidad Autónoma el impulso de la Estrategia de envejecimiento Activo del Principado de Asturias, 2018-2021 (ESTRENA). El proceso seguido en elaboración de la estrategia utiliza el modelo de coproducción. Si bien en su redacción participaron dos equipos, uno de investigadores de la Universidad de Oviedo y otro de personal técnico de la Consejería de Servicios y Derechos Sociales, la definición de las medidas que contiene es fruto de la participación de las personas mayores y de los y las profesionales que trabajan con ellas, de las asociaciones  de mayores y de una amplia representación de la sociedad civil incluyendo a los socios del partenariado Reference Site Asturias y a los agentes sociales más representativos. Refernce Site es el sello otorgado por la Unión Europea que reconoce a nuestra región como sitio europeo de referencia en materia de envejecimiento activo. El desarrollo de muchas de las medidas que contiene la estrategia resulta más fácil aprovechando la coproducción como modelo metodológico.

Si bien el modelo de coproducción en materia de servicios sociales no es un concepto novedoso y en décadas anteriores aparece muy frecuentemente en la literatura científica, también en nuestra Comunidad Autónoma (Arenas, 2008), destacar que va a estar muy presente en las recomendaciones futuras de la Comisión Europea para el desarrollo de las políticas públicas.

Bibliografía

  • ARENAS MARTÍNEZ, M., (2012). De usuarios a ciudadanos. Participación y coproducción en las políticas y servicios sociales. En: Madrigal & Carrillo (Coords.), Nuevos tiempos, nuevos retos, nuevas sociologías. (pp. 345-355). Toledo: ACMS.
  • PESTOFF, V. (2008). Gobernanza democrática, coproducción y Tercer Sector  en la provisión de servicios sociales en Suecia. Panorama Social, 9, 147-158.
  • PARÉS, M. (2017). Repensar la participación de la ciudadanía en el mundo local. Barcelona: Diputación de Barcelona.